Los mercadillos de segunda mano en Jap\u00f3n son, inesperadamente, una fuente inagotable de tesoros escondidos. Ya sea en la esquina de un parque o en la explanada de un estadio se nos ofrece la oportunidad \u00fanica de hacernos con los m\u00e1s inesperados y caprichosos objetos que har\u00e1n de su visita al pa\u00eds del sol naciente una verdadera aventura a la caza de tesoros. \u00a1Les invitamos a explorar!<\/p>\n
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Y, \u00bfrealmente vale la pena invertir mi tiempo en ir a un mercadillo de segunda mano?\u2014se preguntar\u00e1n. La respuesta es \u00a1\u00a1s\u00ed!! Pues, a diferencia de otros pa\u00edses, donde los mercados de segunda mano\u00a0est\u00e1n inundados de objetos bastante desgastados que est\u00e1n a un paso de ser basura, en los de Jap\u00f3n podr\u00e1n encontrar una gran variedad de objetos en grandiosas condiciones o incluso hasta nuevos y empaquetados, \u00a1a precios de ganga!<\/p>\n
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Aunque a muchos les parecer\u00e1 que esto es demasiado bueno para ser cierto, aquellos que han tenido la oportunidad de residir en Jap\u00f3n por periodos largos de tiempo han podido comprobar que es una sorprendente realidad, ya que, desde la post-guerra, se tiene muy arraigado el concepto de mottainai<\/a><\/em>\u00a0y el\u00a0evitar, en la medida de lo posible, el desperdicio de aquello que tiene a\u00fan vida \u00fatil, abanderando, recientemente, la moda de introducir en la poblaci\u00f3n las ventajas de reciclar.<\/p>\n