En Tokio, en el corazón del distrito de Shibuya, a muy poca distancia del famoso cruce multi-direccional, hay una estrecha calle peatonal de poco más de 100 metros con un curioso nombre: Supeinzaka (‘cuesta de España’). Aunque pueda parecer un dato bastante trivial, en realidad aún más curioso de lo que parece, porque la mayoría de calles en Japón carecen de nombre alguno.
Supeinzaka: rinconcito tranquilo en Shibuya
Supeinzaka no destaca por nada en particular y, en realidad, no te transporta a España (excepto por las banderas que ondean en algunos edificios). De hecho, es bastante similar al resto de vías colindantes. La única diferencia significativa es que Supeinzaka es mucho más tranquila que el resto de Shibuya y se puede caminar tranquilamente sin chocarse con nadie. Supeinzaka se abre paso en el bullicioso barrio entre un edificio de restaurantes y un enorme Pull&Bear ultra-moderno de seis plantas (del gigante textil español Inditex) que parece estar en esta ubicación exacta por obra del destino. Esto es lo más parecido a España que nos encontramos en la calle.
Tiendas de ropa y restaurantes de comida mediterránea
Como no podía ser de otra manera, la calle está llena de tiendas de ropa y complementos femeninos. Además, el fabricante de calzados norteamericano Crocs tiene su tienda insignia en Japón en este punto exacto de Tokio. Pero la mayoría de la gente que busca esta calle lo hace por sus restaurantes de estilo mediterráneo.
Vidrio lleva muchos años siendo uno de los restaurantes españoles de referencia en Tokio. En su menú encontramos platos y productos importados desde España tales como jamón ibérico, tortilla de patatas, gambas al ajillo, calamares y la típica paella, además de una selección de vinos, cervezas y sangría.
La Soffitta, otro de los restaurantes clave de Supeinzaka, se publicita como una pizzería al horno de leña, aunque en realidad ofrece una variedad de platos italianos (pasta, carnes, embutido, tartas, etc.) con un precio de 1000 y 3000 yenes para la comida y la cena respectivamente.
El bistrot Bio Café cierra el afamado triángulo mediterráneo España-Italia-Francia con una selección de cafés, bollería, pan y platos fríos y calientes que aúnan lo mejor de las gastronomías francesa y japonesa. Bio Café ofrece menús vegetarianos y veganos con productos orgánicos por un precio de entre 1000 y 1400 yenes.
La calle finaliza en un tramo de escaleras que desemboca en el gigantesco centro comercial PARCO. Según algunas versiones, el nombre de la calle deriva, en realidad, de la escalinata de la Plaza de España de Roma. Pero, puesto que tampoco se asemejan en absoluto, lo dejaremos como estaba.
Aún sin trasladarte visualmente a España, Supeinzaka es un remanso de paz en el caos urbano que es Shibuya, además de uno de los mejores puntos de la ciudad para disfrutar de las gastronomías ibérica y mediterránea.