Osaka es famosa en todo Japón por su deliciosa gastronomía, su vibrante vida nocturna y su amigable gente. Es una ciudad loca, llena de luces de neón, de carteles y fachadas con decoraciones originales y de puestos de comida callejera. Pero, a diferencia de la vecina Kioto, Osaka no es conocida por sus templos y santuarios.
Estamos acostumbrados a ver imágenes de las bulliciosas calles de Namba, del ambiente retro-futurista de Shinsekai, las kilométricas calles abarrotadas de tiendas de Tenjinbashi o de los enormes centros comerciales de Umeda.
Pero la ciudad también tiene su parte tradicional. Con su castillo rodeado de cerezos en flor en primavera o multitud de templos y santuarios, evocan una Osaka más clásica. Y como soy amante de la cultura tradicional nipona, quise descubrir esa parte más desconocida.
Pero en lugar de acudir a los lugares más clásicos, decidí buscar otros con esa esencia diferente y extravagante de la ciudad. Algunos son tan inusuales que ni siquiera los osakeños saben acerca de ellos.
Os invito a descubrir unos templos y santuarios de Osaka especiales y originales, con alguna característica diferente al resto y que, seguramente, os sorprenderán.
Santuario Namba Yasaka en Namba, Osaka
A unos ocho minutos a pie de las turísticas y bulliciosas calles de Namba se encuentra uno de los santuarios sintoístas más originales de la ciudad: Namba Yasaka (難波八坂神社).
En los últimos tiempos se ha ido haciendo más conocido en Instagram. Son muchas las personas que acuden a tomar fotografías o selfies en este fotogénico lugar y que luego las suben a sus redes sociales.
La característica principal de Namba Yasaka es el edificio con forma de cabeza de león (aunque a mí me recuerda más a un dragón). Dentro de su boca alberga un altar donde los japoneses acuden para atraer la buena fortuna y prosperidad en sus negocios o estudios. Se dice que la boca abierta se traga la mala suerte y los espíritus negativos.
Aunque había visto fotografías, quedé sorprendida por el gran tamaño del edificio: doce metros de alto y once metros de ancho. Sus colmillos son gigantes y su mirada impresiona.
A la derecha del león, llamado Ema-den, está el edificio del pabellón principal que me resulta especialmente bonito por el contraste de su fachada blanca y el tejado verde. También podemos encontrar la tienda en la que venden los amuletos del santuario. Allí se pueden adquirir unos ema (tablillas de madera para escribir deseos) muy originales, con dibujos del león o los omikuji donde podremos leer nuestra fortuna.
Tabillas ema Omikujis con la fortuna
Santuario Tsuyu no Tenjinja en Umeda, Osaka
El siguiente santuario Tsuyu no Tenjinja (露天神社), más conocido entre los locales como Ohatsu Tenjinja o Tsuyuten, también se encuentra cerca de otro de los puntos neurálgicos de Osaka. Está a tan sólo diez minutos a pie de Umeda, una de las zonas comercreiales más grandes de la ciudad.
Al principio me costó encontrar el acceso al santuario. Pero al final localicé una pequeña entrada rodeada de bares y restaurantes en una zona especialmente famosa entre los japoneses para tomar algo al salir de trabajar.
Recomiendo visitar este lugar por la noche especialmente, ya que además de ser una zona con un ambiente muy animado de Osaka, el santuario se ilumina al caer el sol.
Entrada al santuario Ohatsu Tenjinja
Los amantes suicidas
Tsuyuten, uno de los templos y santuarios más antiguos de Osaka, alberga la historia de un trágico amor de más de 1300 años de antigüedad.
Los protagonistas de esta leyenda son Tokubei, aprendiz de mercader y su enamorada Ohatsu, una prostituta que trabajaba en una casa de té.
Su historia es una combinación entre presiones familiares, problemas económicos y traiciones de amistades. Todos estos factores impiden el romance de los dos jóvenes, que son incapaces de permanecer juntos pese a sus sentimientos. Por ello, deciden poner fin a la trágica situación quitándose sus vidas en un bosque que antiguamente rodeaba el santuario Tsuyuten.
Actualmente, Tsuyuten es un lugar famoso al que acuden jóvenes parejas o personas que quieren encontrar su verdadero amor.
Por todos los rincones de este santuario de Osaka podemos ver referencias a la trágica historia de amor. Hay varias estatuas e imágenes de los jóvenes protagonistas y un altar dedicado al amor.
Pequeño santuario dedicado a Ohatsu y Tokubei
Una de las cosas que más me llamó la atención, además de descubrir la leyenda de los amantes, fueron las tablillas de madera ema. En ellas está pintada la cabeza de una geisha, que representa a Ohatsu, pero el rostro está en blanco. Muchas jóvenes japonesas acuden a Tsuyuten para dibujar la cara de Ohatsu y escribir sus peticiones a los dioses en el reverso de la tablilla. Hay algunos diseños muy originales y divertidos de la heroína de la historia que da el sobrenombre a Ohatsu Tenjinja.
Santuario Himejima en Himejima, Osaka
A diez minutos de Umeda tras un sencillo trayecto de tren, se encuentra la estación de Himejima, que tiene el mismo nombre que el siguiente santuario que vamos a descubrir. Este lugar sagrado se encuentra a unos siete minutos andando de la estación, en una zona tranquila y residencial.
Descubrí Himejima (姫島神社) en uno de mis recorridos buscando goshuin limitados y originales, y aparte de ello, hubo otro aspecto del lugar que me llamó la atención.
En Himejima, los ema no son tablillas de madera sino que las peticiones a los dioses se escriben en conchas de vieiras. Tras escribir los deseos, se debe atar nuestro inusual ema en una de las columnas repletas de conchas que hay en el santuario.
Columnas de ema de conchas de vieira
En medio de estas cuatro columnas de vieiras se encuentra una estatua con un pequeño agujero. Si queremos que el deseo que hemos escrito en el ema sea concedido por los dioses, es necesario lanzar una pequeña pelota que nos darán allí mismo y colarla por el agujero de la estatua.
Aunque en teoría parece fácil, es realmente complicado que la pelota pase por el agujero y sólo unos pocos afortunados verán sus peticiones hechas realidad. O eso dice la leyenda.
Amuletos originales
Otra de las cosas que me gustan de este santuario son sus originales omikuji, los papelitos que nos dicen nuestra fortuna. Además de vender el típico papelito similar al del resto de los santuarios, en Himejima también tienen un omikuji algo diferente. Por 500 yenes se puede adquirir una pequeña muñeca de madera pintada a mano, similar a la Matryoshka rusa. En la base de esta muñeca está escondido el papel con nuestra fortuna.
Omikuji dentro de la muñeca
Con estos omikuji tan originales, aparte de conocer qué nos depara el futuro, podremos llevarnos un recuerdo artesano y original. Es un detalle diferente a los otros templos y santuarios de Osaka.
Y, como he comentado antes, Himejima es un lugar indispensable para los coleccionistas de goshuin. Aparte de varios diseños que se venden de forma limitada y cambian cada mes, el diseño básico tiene un sello de un torii rojo ya que Himejima está lleno de estas bellas puertas sagradas.
Goshuin con sello de Torii
Guardianes del santuario
Templo Senkoji en Hirano, Osaka
En el barrio de Hirano, fácilmente accesible desde la estación de Tennoji se encuentra uno de los más originales y diferentes templos de Osaka y, me atrevería a decir, de todo Japón.
Senkoji (全興寺) es la frontera entre el cielo y el infierno, entre el bien y el mal. Una experiencia sólo apta para los más ávidos aventureros, donde podremos comprobar si nuestra alma es pura o tenemos un demonio en el interior.
Lo primero que encontramos tras atravesar la puerta principal del templo es una representación de Fudo Myoo, el inamovible. También conocido como Acala, es una de las deidades guardianas de la religión budista. La ferocidad de su cara, con dos colmillos saliendo de su boca me llamó especialmente la atención ya que es muy diferente a las representaciones de otros dioses budistas, como el bonachón Buda.
Entrada al templo Senkoji
Fudo Myoo, guardián del Budismo
Después de pasar la tienda donde venden amuletos y otros artículos del templo, empieza el viaje al infierno. Para poder acceder a él, hay que comprar un ticket que cuesta 100 yenes y que nos permitirá cruzar la puerta al purgatorio.
La puerta del infierno
Antes de entrar podemos realizar un pequeño cuestionario en una maquina que nos permitirá comprobar si nuestra alma es digna del cielo o si por el contrario irá al infierno.
Esta máquina nos hará algunas preguntas (al lado hay un papel con las indicaciones y traducción en inglés) y tendremos que contestar acorde a nuestra personalidad.
Al lado de está maquina, hay un lector de QR por el que tendremos que pasar el ticket que habíamos comprado para que se abran las puertas que nos llevarán directos al infierno.
Máquina para saber nuestro destino Puerta al inflamando
Tras cruzar la puerta, nos encontraremos en un pequeño habitáculo en semi penumbra, rodeados de demonios y otras bizarras criaturas. Debajo del altar que tenemos enfrente hay una especie de campana que tendremos que golpear con un mazo para que empiece el evento de sonido y una película corta que podremos ver en un monitor que hay en la sala.
Frente a nosotros tenemos a Enma, el señor de los espíritus y los muertos y guardián del inframundo.
En el lado derecho, tras una vitrina están las terroríficas representaciones del demonio protector de Enma y a su lado está Yama Uba, una figura del folklore japonés. Yama Uba es conocida como la Bruja de la Montaña y dicen que se come a cualquier desafortunado que se cruce en su camino.
Yama Uba, la Bruja de la Montaña
En la parte izquierda están representadas las figuras de los Diez Reyes de la religión Budista. Ellos son los encargados de juzgar el alma de las personas y decidir si podrán reencarnarse.
Las escaleras al cielo
Tras abandonar el inframundo, es el momento de que nuestras almas se encaminen al cielo.
Y, paradójicamente, el cielo de Senkoji está bajo tierra. Tras bajar las escaleras al paraíso accederemos, de nuevo, a otro habitáculo en semi penumbra. En el centro de la sala hay un Mandala, la geometría de la religión Budista y en las paredes, rodeando a este símbolo sagrado podemos encontrar la presencia de 151 Budas.
Escaleras de acceso al cielo Mandala sagrado Estatuillas de Buda
Dagashi-ya, la antigua tienda de dulces japoneses
En el mismo complejo del templo hay una pequeña habitación que sirve como exhibición de una dagashi-ya. Las dagashi eran las antiguas tiendas donde los niños japoneses de los años 50 y 60 podían comprar dulces, chucherías y juguetes.
En esta exhibición se pueden contemplar algunos de los productos que se podían adquirir en estas tiendas.
Juguetes de los niños japoneses en las décadas 50 y 60
El complejo de Senkoji es grande y está lleno de pequeños detalles que merecen la pena descubrir. Durante mi visita, como no había muchos turistas, uno de los responsables del templo me fue acompañando y explicando multitud de cosas que desconocía sobre la religión Budista y la cultura japonesa. Fue una experiencia única en uno de los templos más sorprendentes e inigualables de Osaka.
Jizo, una de las deidades Budistas Pabellón principal del templo Senkoji
Santuario Nunose en Matsubara, Osaka
El santuario Nunose (布忍神社) se encuentra en un pequeño y tranquilo pueblo llamado Matsubara. Está algo alejado del centro de la ciudad aunque es fácilmente accesible desde Tennoji. La estación de tren más cercana se llama Nunose, al igual que el santuario.
Matsubara es una zona rural de pocos habitantes pero que se llena de gente en febrero, en el día del Setsubun ya que en el santuario se celebra un famoso festival de faroles de papel.
Pabellón principal del santuario Nunose
Tablillas ema
Aparte de este festival, Nunose también se está haciendo popular en redes sociales por sus peculiares omikuji (papeles de la fortuna). En este caso se llaman koi mikuji, ya que a diferencia de los omikuji normales que predicen diferentes aspectos como el amor, la salud, los negocios, los estudios… los koi mikuji de Nunose sólo están relacionados con el amor.
Una fortuna diferente
Hay otra cosa que también lo diferencia de los omikuji normales, que suelen ser sobrios, serios y escritos en caracteres pequeños.
El koi mikuji de Nunose se trata de una hoja de papel con una simple frase escrita en grandes caracteres japoneses y en ocasiones suele ser impactante o con un toque de humor.
En mi koi mikuji pone lo siguiente:
いつ
選ばれても
いいように。
いつ
捨てられても
いいように。
Que en español sería algo similar a “Estate siempre listo para ser elegido. Estate siempre dispuesto a ser abandonado.”
Esto quiere decir que en el amor hay estar preparado y tener un corazón fuerte para afrontar todo tipo de situaciones, tanto las buenas como las malas.
En el templo explican que eligieron este tipo de omikuji ya que cuando la gente compra uno normal, por lo general sólo suelen pararse a leer el tipo de fortuna: si es buena, mala o regular. Pero no se detienen a leer el resto de información.
Por eso, ellos quisieron hacer un omikuji que fuese simple pero impactante, que hiciese reflexionar y pidieron a un artista que diseñara los koi mikuji.
En las redes sociales la gente está subiendo fotos de sus koi mikuji y hay algunas frases tan divertidas como estas:
Me quiero casar. Me quiero casar. Me quiero casar. Me quiero casar. Me quiero casar. Me quiero casar.
Qué pena.
Estás a punto de romper.
La verdad es que con estos koi mikuji tan impactantes y originales me quedé con las ganas de comprar alguno más y ver otras frases diferentes. Son los papeles de la fortuna más divertidos de todos los templos y santuarios de Osaka.
Komainu, guardianes de los santuarios 2020 es el «Año de la Rata» en el calendario chino
¿Cómo llegar hasta estos templos y santuarios de Osaka?
Estos templos y santuarios están repartidos en diferentes zonas de Osaka. En este mapa podréis encontrar la localización de cada uno de ellos y así poder calcular la mejor ruta para acceder a ellos dependiendo de dónde estéis.