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Ogigahama es una playa artificial muy poco convencional que se encuentra en la costa de Wakayama, uno de los territorios más bonitos y remotos de Japón. En esta zona se sitúa Tanabe, una pequeña ciudad costera  que es, en realidad, la segunda más grande y poblada de toda la prefectura.

 

Tanabe: ciudad tradicional con una playa poco convencional

A lo largo de sus estrechas calles nos encontramos diversos templos, santuarios, jardines, aguas termales y toda clase de edificios históricos de las épocas Edo y Meiji. No obstante, el principal reclamo turístico de Tanabe recae en su playa, de un estilo californiano muy poco común en Japón. Ogigahama, que es el nombre que recibe la playa, se encuentra a tan solo 10 minutos a pie de la estación de tren (Kii Tanabe Station), que conecta la ciudad con Osaka y otras poblaciones.

Playa de Ogigahama, en Tanabe (Wakayama, Japón)

La cultura japonesa no está muy unida a la vida en la playa (sí al mar, pero no a la playa), al contrario que en Europa, Australia y Estados Unidos, donde lo normal es no encontrar hueco para extender la toalla en la arena en cualquier mes de verano. Por esto mismo, resulta muy llamativo encontrar una playa tan occidental en la zona más tradicional de todo Japón, ni más ni menos. Ogigahama se fabricó con arena importada de Perth (Australia) hace unos años, y cada cierto tiempo recibe un nuevo cargamento para completar las zonas que se van quedando ‘calvas’. Es un lugar perfecto para pasar unas vacaciones tranquilas tomando el sol, sobre todo después de haber recorrido el precioso Kumano Kodo; una ruta de peregrinación hermanada con el Camino de Santiago español.

Malecón en la playa de Ogigahama, en Tanabe (Japón)

 

Ogigahama: una playa bien dotada y poco transitada

Ogigahama, al contrario de a lo que las playas del Mediterráneo me tienen acostumbrada, rara vez se llena de gente. Ni siquiera en julio y agosto, cuando el termómetro suele rozar fácilmente los 40º. La zona cuenta con toda clase de instalaciones: baños públicos gratuitos, duchas, taquillas, máquinas expendedoras y aparcamientos. En verano se abre un pequeño establecimiento a pie de playa donde se venden refrescos y cócteles de todo tipo. Aunque, si se quiere ahorrar, lo mejor es comprarse algo en uno de los supermercados que hay en la zona, o incluso en las máquinas expendedoras que están en la entrada. Es muy importante tirar los restos en las papeleras, porque en Japón se respetan enormemente la pulcritud y el civismo en general.

Playa artificial de Ogigahama en la ciudad de Tanabe (Japón)

Los jóvenes de la zona suelen jugar al voleibol todas mañanas en los meses de verano, por lo que, si te animas (y si te dejan), seguramente puedas unirte a la diversión. El toque californiano lo ponen la cancha de tenis, el gimnasio al aire libre y el parque de skate que se encuentran al lado de la playa y que se pueden usar gratuitamente todos los días (de hecho, suelen estar más abarrotados que la propia playa).

Paseo marítimo en la playa Ogigahama de Tanabe (Japón)

 

Paseo marítimo para disfrutar del Pacífico

Cuando te aburras de tomar el sol y beber mojitos, lo mejor que puedes hacer es darte un paseo por el pequeño paseo marítimo que parte del litoral y que cuenta con una serie de escalones para sentarse a contemplar el Océano Pacífico. Suele haber pescadores por la zona, y mucha gente sentada leyendo libros. Hay que tener cuidado, sobre todo por la tarde, porque el oleaje puede llegar a ser bastante agresivo.

Bella vista del océano desde la paya de Ogigahama.

La playa cobra vida en verano, durante el festival de Tanabe, que se celebra anualmente en los últimos días del mes de agosto. De hecho, es la única época del año en la que es normal encontrarse a gente en la playa bien entrada la noche e incluso de madrugada (hay que tener en cuenta que los japoneses se acuestan pronto, y lo normal en Wakayama es meterse en la cama a eso de las siete o las ocho de la tarde). En definitiva, Ogigahama es una playa muy curiosa, muy occidental y muy bien cuidada. El destino perfecto para los que quieran conocer la cultura japonesa y tumbarse a tomar el sol al mismo tiempo.

 

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Virginia González

Virginia González

Freelance writer and translator from Spain, wanna be amateur photographer and film enthusiast. Always saving up for the next big trip. / Escritora y traductora freelance española, aficionada a la fotografía y amante del cine. Siempre estoy ahorrando para mi próximo viaje.

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