Estás tomando un tren bala o Shinkansen 新幹線 en Japón y estás pasando el rato dentro de la estación de tren. Ves muchas tiendas abarrotadas de gente vendiendo una gran variedad de cajas de colores, y en ese momento aparecen mil preguntas en tu mente. Pero aquí estamos nosotros, amigo lector, para responder a todas tus dudas. En estas tiendas, encontrarás una caja de comida japonesa llamada ekiben 駅弁, diseñada específicamente para comer dentro del Shinkansen.
Historia del ekiben
La cultura de llevar la comida en cajas forma parte de la sociedad japonesa desde hace mucho tiempo, ya que ha sido el método más común para transportar comida fuera de casa. Por ejemplo, durante el Periodo Sengoku, cuando Japón se vio envuelto en muchas guerras a nivel nacional, tuvieron que encontrar una forma eficaz de trasladar la comida. Pero los bentos solo no eran útiles para las guerras, sino también para el ocio. Durante la temporada del hanami, cuando la gente quería disfrutar de los cerezos en flor, también tenían que encontrar un método eficaz para llevar su comida bajo los árboles.
Durante el Periodo Edo, algunos teatros de kabuki y noh vendían el makunouchi bento durante los intermedios, traducido literalmente como «la caja de entre actos». Este bento inspiró el diseño actual de los ekiben, pero no quiero hacerte ningún espóiler de la historia, así que empecemos por el principio.
Ekiben: el nacimiento de una estrella culinaria
Hoy en día, el trayecto entre la estación de Utsunomiya y la de Ueno dura menos de una hora. Pero en el siglo XIX, este mismo tramo te llevaría más de cuatro horas. Así pues, era esencial llevar comida durante el viaje para no pasar hambre y es por eso que el 16 de julio de 1885 se vendió el primer ekiben en Utsunomiya.
¿Sabía Kahei Saito, el dueño del pequeño puesto de Shirokiya frente a la estación de Utsunomiya que iniciaría una nueva era vendiendo el primer bento de la historia? Su caja de comida era sencilla: dos onigiri con hojas de bambú y dos rábanos encurtidos por cinco sen (100 sen equivalen a un yen). Puede parecer muy barato, pero en aquella época cinco sen se consideraban una fortuna. A medida que el sistema ferroviario japonés se expandía y la necesidad de ekiben crecía por la aparición de viajes más largos, muchas estaciones siguieron la misma estrategia que la estación de Utsunomiya.
Años más tarde, en 1889, en la estación de Himeji se empezaba a vender el ekiben más popular, inspirado en el diseño del makunouchi bento.
El auge de los ekiben en Japón
La presencia de militares en el siglo XX en Japón ayudó a los ekiben a expandirse aún más, puesto que tenían que viajar por todo el país, y necesitaban comer fuera la mayor parte del tiempo. Y la Segunda Guerra Mundial también impulsó el éxito de la industria del ekiben, ya que cerraron muchos restaurantes. Quizá podríamos comparar la caja bento del tren con nuestro boom de la comida para llevar durante la pandemia.
Tras la Segunda Guerra Mundial, el crecimiento económico permitió a los japoneses viajar por todo el país y mejorar su calidad de vida, creando así la Edad de Oro del ekiben.
Todo lo que sube, tiene que bajar
En la década de 1980, el auge de los ekiben se desvaneció, siendo varios factores los responsables de su declive. En primer lugar, la aparición de billetes de avión más asequibles crearon nuevas alternativas a la hora de viajar. También influyó el aumento de las tiendas de conveniencia, donde la gente podía comprar un bento de forma rápida y barata. Pero, aunque parezca irónico, una de las mayores razones de la desestabilización del mercado del ekiben fue la popularidad de los trenes bala:
- El tren bala ya no paraba en todas las estaciones, lo que significaba que en esas estaciones ya no podían vender el ekiben.
- Mejoras con el tiempo de viaje, haciendo los trayectos más cortos y añadiendo la posibilidad de no tener que comer dentro del tren.
- Muchos de los bento se vendían originalmente a través de la ventanilla, y estas ya no se abren actualmente en los Shinkansen. Así que este fenómeno también desapareció.
Sin embargo, no creo que la industria del ekiben desaparezca pronto: Sigue vivita y coleando. Con unos 4.000 tipos diferentes de bento, estas cajas de comida tiene muchas formas de sobrevivir, como ofrecer productos locales atractivos para promocionar las zonas regionales o colaborar con anime o marcas de moda. Existe incluso un manga llamado Ekiben Hitoritabi, que explica la historia de un viajero solitario que recorre Japón probando diferentes bentos en el Shinkansen.
Bentos famosos en Japón
Necesitaríamos días y días para completar esta lista, ya que hay muchos tipos de ekiben. Desde las especialidades locales que se venden en cada prefectura hasta los más estrafalarios sin olvidar los temporales, el mundo de estos bento es infinito.
Si visitas Hokkaido y quieres probar comida local, no te pierdas el ekiben Bokoi-meshi de la estación de Bokoi, hecho con bolas de arroz con almejas frescas. Si estás en Honshu (la isla principal de Japón), el ekiben Masuzushi de la prefectura de Toyama es una buena opción, con sushi de trucha envuelto en hojas de bambú. O ve a Nara y prueba el bento de sushi Kakinoha, que incluye el sushi más conocido de Nara envuelto en hojas de caqui.
Si lo que buscas es uno de bien auténtico, viaja hasta Takasaki en la prefectura de Gunma, el principal productor de daruma japoneses, unos muñecos tradicionales inspirados en Bodhidharma, fundador de una rama del budismo zen. ¿Ha adivinado la forma de su caja bento? Exacto, ¡un daruma! Otro ekiben gracioso es el bento Yukidaruma de la prefectura de Niigata, donde comerás tu almuerzo desde el interior de un pequeño muñeco de nieve.
Si buscas un ekiben sostenible, haz una parada en Hita, en la prefectura de Oita. El Hita Kikori Meshi es un bento de madera elaborado con árboles de la zona. Incluye una pequeña sierra de juguete de madera para cortar uno de los ingredientes. Después de comer, se puede tirar en cualquier sitio, ya que está hecho únicamente de materiales desechables.
Por último, si le gustan los trenes, ¿por qué no compras el ekiben con forma de tren bala? La caja se puede reutilizar y, después de disfrutar de la deliciosa comida, podrás utilizar la caja de Shinkansen para decorar tu casa. ¡Siempre sales ganando!
¿Cómo puedo comprar un ekiben?
Hay muchas oportunidades de comprar tu ekiben antes de viajar. No solamente dentro de la estación, sino en las tiendas adyacentes que venden estos bento para trenes. Si la estación está al lado de un centro comercial, te recomiendo mirar a los pisos inferiores para encontrar la sección de comida. A veces estas tiendas ofrecen un servicio de comida recién hecha, así que puede que tengas que esperar, pero podrás tener una comida cocinada antes de tu viaje.
Si te has olvidado de comprar un bento y ya estás en la estación, encontrarás tiendas por todas partes, incluso en el andén. Búscalas como si se tratara de una búsqueda del tesoro y compra tu ekiben favorito. Normalmente, estas tiendas se reponen durante el día, con su punto álgido durante el mediodía hasta el final del horario de trenes. Por supuesto, las estaciones más grandes tienen más bento, mientras que las más pequeñas pueden quedarse sin existencias por la tarde.
Y por último, pero no por ello menos importante, puede adquirirlos en una feria de ekiben. Sí, has leído bien. En algunas ciudades, como Tokio u Osaka, se celebra anualmente el torneo de ekiben, donde se pueden comprar entre 300 tipos distintos.
¿Cuánto cuesta un ekiben?
Existe una amplia gama de precios que va desde unos 700 yenes por un sándwich hasta más de 150.000 (¡más de 1.000 euros!) por un bento de lujo como el Nikko Buried Treasure Bento. Pero uno promedio puede encontrarse por unos 1.200 – 1.800 yenes. Los precios se encuentran al lado de cada bento.
Ahora ya eres un profesional del ekiben. Cuando viajes a Japón, recuerda ir a la estación unos minutos antes para comprar tu bento favorito y disfrutarlo durante el viaje en el tren bala. Al fin y al cabo, esta es una de las muchas experiencias locales que vivirás en Japón.