¿Conoces la Ruta Nakasendo (中山道)? También llamada Kisokaido, fue una de las cinco rutas Edo (Gokaido, 五街道) durante el período feudal de Tokugawa. Tenían un papel importante conectando la capital de Kioto con diferentes puntos estratégicos. La más importante era la Ruta Tokaido entre Tokio y Kioto trazando la costa del Océano Pacífico.
Tokugawa Ieyasu comenzó la construcción de las cinco carreteras para aumentar el control sobre el país en 1601, pero el shogun Tokugawa Ietsuna, el cuarto gobernante del shogunato Tokugawa, las declaró carreteras principales de la nación. Así, se construyeron varios shukuba (宿場町 – estaciones de descanso) a lo largo de las rutas para que los viajeros pudieran descansar, comer, comprar comida y pasar la noche. Las rutas florecieron debido a la política gubernamental conocida como sankinkoutai (参勤交代), que requería que los daimyo (大名 – gobernantes regionales) viajaran hasta Edo (江戸 – actual Tokio) por esta ruta, a veces acompañados por procesiones de miles de hombres.
Una de las carreteras más importantes durante la era Edo: Nakasendō
Hablemos de la Ruta Nakasendo. Tenía 69 estaciones y atravesaba las provincias de Musashi, Kōzuke, Shinano, Mino y Ōmi. Además de Tokio y Kioto, Nakasendo pasaba por las prefecturas actuales de Saitama, Gunma, Nagano, Gifu y Shiga, con una distancia total de aproximadamente 542 kilómetros de largo.
La Ruta Nakasendo se traduce como «la ruta a través de las montañas centrales». A diferencia de la Ruta Tokaido, «la ruta marítima del este», era una ruta segura y de buena calidad por la que viajaban muchas personas famosas y señores adinerados.
En el periodo Edo temprano Japón sufrió muchos cambios políticos, legales, culturales e intelectuales, incluida la renovación de la red vial. Antes de configurar estas rutas comerciales oficiales, otros caminos más cortos conectaban ciudades pequeñas. Una de esas rutas fue Kisoji, que consistía en once estaciones que luego formaron parte de Nakasendo, desde Niekawa-juku a Magome-juku. Antes del periodo Edo, esta ruta se llamaba Sando y Tosando pero al cabo del tiempo tiempo, en 1716, el nombre cambió a Nakasendo.
Aunque hay muchos edificios modernos a lo largo de Nakasendo, existen aún casa antiguas y otras restauradas en las últimas décadas. La zona más conocida se encuentra en el valle de Kiso, entre Tsumago-juku y Magome-juku, con una gran popularidad entre los viajeros actualmente. Esta área también se relaciona con el escritor Toson Shimazaki, quien relató los efectos de la Restauración Meiji en su novela «Antes del amanecer». A través de este paseo agradable de 8 km observarás la arquitectura tradicional preservada que Tsumago-juku y Magome-juku tienen para ofrecer. La ruta entre estos complejos históricos requiere de dos a tres horas de caminata por el pavimento empedrado con impresionantes vistas de los bosques y cascadas.
En este artículo, te narramos la ruta que comienza desde el área de descanso Nakatsugawa (cerca de la estación JR Nakatsugawa) hasta el área de descanso Tsumago.
Explorando los shukuba de la Ruta Nakasendo
Nakatsugawa-juku
Empieza tu viaje en la estación Nakatsugawa. En Nakatsugawa-juku (中津川宿) existen varios restaurantes que te permiten llenarte de energía antes de partir!
Puedes hacer una parada en el Parque Asahigaoka con algunos torii, las famosas puertas rojas lacadas japonesas que marcan la entrada a los santuarios sintoístas.
Podrás disfrutar de unas calles libres de vehículos. Pero, por favor, intenta caminar por la zona peatonal como símbolo de respeto.
Es posible que encuentres señales de ruta para caminatas con bastante frecuencia a lo largo de Nakasendo. Pero para orientarte, solo necesitas seguir la superficie de la carretera específica para mantener el rumbo, un elegante asfalto teñido de guijarros amarillos. Una especie de camino de ladrillos amarillos.
También podrás ver la vida cotidiana de los residentes… …o alguas de sus creaciones artesanales.
A lo largo de la ruta, los paisajes pacíficos dan una bienvenida. Los campos de arroz se extienden hasta donde alcanza la vista, destacando exuberantes cadenas montañosas por detrás, así como pequeñas calles estrechas y otras arboledas y pequeños templos.
El área de descanso Ochiai-juku
Un punto destacado de Ochihai-juku (落合宿) es el honjin (本陣 – posada del período Edo). Solía ser el alojamiento para señores y gobernadores de castillos y accedían dentro de la posada por una entrada especial, por respeto a su rango y también por razones de seguridad.
Siempre tenían que mantenerse a salvo: disponían de ninjas como guardaespaldas que vigilaban desde el techo para observar desde lejos un posible ataque de sus enemigos. Siempre había un acceso directo desde el techo hasta la habitación cerca del comedor que les permitía proteger a su señor de inmediato. Incluso si la defensa no era suficiente, podrían intentar escapar. Incluso si esta defensa no era suficiente, podían intentar escapar a través de uno de los muchos túneles o paredes secretas del honjin.
Los pueblos de la ruta están bien conservados. Un cartel con los kanji de Nakasendo. Este camino forma parte de laguna de las rutas.
Magome-juku y Tsumago-juku
Después de pasar por el área de descanso Ochiai, te esperan más lugares increíbles: el área de descanso Magome (馬籠宿) y el área de descanso Tsumago (妻籠宿).
El punto culminante de mi visita fue el área de descanso de Tsumago. Compuesta por docenas de casas tradicionales japonesas, el pueblo ha mantenido una verdadera autenticidad. Con un ambiente tranquilo y relajado, encontrarás restaurantes o tiendas con especialidades gastronómicas tradicionales y regionales, así como diversas artesanías.
Además de aquellos con espíritu gatuno que aman escabullirse en las pequeñas calles laterales, perderse en estos callejones es un placer, ya que los detalles arquitectónicos son impresionantes. Estas calles parecen estar congeladas en el tiempo contrastando con los grandes paisajes montañosos y boscosos de los alrededores.
Cada tienda tiene sus pequeños secretos, como propietarios decididos a contarle acerca de la región o algunas sorpresas culinarias inesperadas que salen de sus estufas sin avisos ni adornos.
¡Si te gusta un desafío, empieza tu caminata desde el área de descanso Nakatsugawa, ¡hay mucho que ver! Estos 13 km definitivamente valen la pena. Después de visitar el área de descanso Tsumago, ve a la estación JR Nagiso para regresar a la estación JR Nakatsugawa y permanecer en Nakatsugawa, ¡descubre este área en profundidad!
Artículo patrocinado por la ciudad de Nakatsugawa