El festival de las linternas es una de las festividades más famosas de Nagasaki. Se celebra con motivo de la bienvenida del año nuevo lunar entre la última semana de enero y la primera semana de febrero. El festival nos abre un mundo de aventura y romance a la luz de las linternas chinas.
Cruzando el puente Shinchi sobre el río Nakashima, adéntrese en un mar de color en el barrio chino.
Festival de las linternas: un pedacito de China en Nagasaki
El festival de las linternas de Nagasaki es reconocido internacionalmente por ser Patrimonio Cultural, debido a la larga tradición en la celebración del festival y su relación histórica con Dejima. En tiempos del aislamiento auto-impuesto por Japón, esta isla fue el único puerto abierto al extranjero, manteniendo una estrecha relación de comercio e intercambio con China.
Historia del festival
Gracias a las relaciones comerciales entre Nagasaki y China, la comunidad inmigrante creció, trayendo consigo la construcción de varios templos budistas (como Kōfuku-ji y Sōfuku-ji), santuarios y escuelas (como el Templo Confucionista, donde el festival hace una representación especial por la noche), y monumentos que permanecen incluso en nuestros días (como El Puente de los Espejuelos). Todo ello dio pie a que las celebraciones propias de su religión y cultura se realizaran tempranamente dentro de los muros de su área residencial. Más tarde, debido a su popularidad, se extendieron por la ciudad entera.
Nadie sabe ofrecer una fiesta como el Barrio Chino. La ciudad de Nagasaki, donde ambas culturas (la japonesa y la china) tienen tantos años de cooperación, amistad y tradición, termina tirando la casa por la ventana con el festival de las internas para recibir el año nuevo lunar.
Intrínsecamente relacionado con las celebraciones importantes de Nagasaki, el Barrio Chino de Shinchi se caracteriza por celebrar el año nuevo por todo lo alto, decorando un circuito de tránsito con millones de luces y cientos de linternas coloridas.
El festival ofrece información al alcance de los visitantes en todo momento.
Un espectáculo único en Japón
Al encontrarse en el centro de Nagasaki, en el área comercial llamada Hamanomachi, siga el camino trazado por las linternas. Este, atravesando el barrio chino, le llevará hasta las inmediaciones de una plazoleta en la que se ubica el escenario principal de la celebración.
En vísperas del año nuevo chino, la ciudad entera se viste de fiesta. Nagasaki recibe visitantes de todas las latitudes que quieren sumergirse en un mar de luces y color con las más de 15,000 lámparas que decoran el festival.
En los alrededores del escenario principal se encuentran varios negocios con juguetes, recuerdos, ropa y puestos de comida. En la parte superior, para su mejor apreciación, se disponen diversas lámparas. Más que la típica imagen redondeada con las que se conocen, estas lámparas son realmente detalladas construcciones de adornos coloridos que serán encendidas al caer la noche.
Al atardecer, la atención se vuelca definitivamente sobre el encendido oficial de las linternas, especialmente de los animales que representan el año zodiacal chino que entra y el que sale. También cobra especial importancia la representación de deidades y personajes históricos.
Por la mañana y durante la tarde se presentan diversos espectáculos en el escenario. La mayoría están enfocados a que niños y jóvenes conozcan más sobre la milenaria cultura china, como la danza de los leones, el tradicional “Ja Odori” o “Danza del Dragón”, los acróbatas y contorsionistas chinos, rutinas de magia tradicional y el despliegue de destreza del “Biàn Liǎn» o “Cambia Caras”, robando el aplauso de los chicos.
Uno de los sitios que le recomendamos es, sin duda, la carpa principal de las internas, que se encuentra a espaldas del escenario principal, ubicada prácticamente bajo una de las tradicionales puertas lacadas color bermellón. Esta carpa contiene la mayor concentración de lámparas y el altar principal de las deidades a las cuales se les dedica el festival.
Realmente son de admirar el detalle y dedicación puestos en la construcción de cada una de estos hermosas construcciones, las cuales hacen volar la imaginación de todos los visitantes con su belleza. Nos hace sentir que nos hemos adentrado en un mundo de magia y aventura.
Ya sea para disfrutar relajadamente de la belleza de las linternas, o conocer en profundidad las raíces de las tradiciones que le dieron origen, el festival es una experiencia única que presenciar en la vida.
Incluso por la mañana, las bellas linternas son un espectáculo de color y destreza artesanal.
Algunos ejemplos de iluminación que valen la pena destacar son este fénix y dragón, que se encuentran construidos únicamente a base de tazas, platos y cubiertos de porcelana.
El público espera pacientemente a que las linternas que ocupan la carpa principal sean encendidas. Es en este lugar donde se concentran la gran mayoría de las caprichosas figuras que se han ido incrementando año tras año.
Adéntrese en un mundo que parece salido de la película de El viaje de Chihiro, donde las linternas envuelven con su ambarina luz todo el lugar, dándole un aspecto romántico y de aventura.
La belleza de este festival no se encuentra solo dentro de los límites del Barrio Chino de Shinchi, sino que también se derrama sobre diversos sitios. La estación central de la ciudad, el área comercial de Hamanomachi y la vertiente del río Nakashima son algunos ejemplos. En este río se disponen botes pequeños con las lámparas, que flotan corriente abajo, llegando más allá del «Puente de los Espejuelos». Incluso por la noche se puede disfrutar de una caminata romántica y tranquila. Un sitio ideal para conversar.
Cómo llegar al festival
Para llegar al festival de las linternas desde la Estación Central de Nagasaki, diríjase a las afueras de la misma y localice el puente peatonal que le dará acceso a la parada sur del tranvía. Aquí deberá subirse en el tren #1 (Línea Azul), con el letrero en dirección hacia la parada Shokakuji-shita. Bájese cuatro estaciones después, en la parada de Tsukimachi. Desde aquí podrá ver el puente Shinchi y las hileras de linternas que forman la antesala de una enorme puerta china lacada en colores rojo y jade que pueden ver en la primera fotografía de este artículo.
Para volver, regrese a través del puente Shinchi hasta la estación de Tsukimachi. Desde aquí, solo tiene que cruzar la calle para acceder a la parada opuesta del tranvía, donde se subirá en el mismo tren #1 (Línea Azul) con dirección a Akasako. Bájese cuatro estaciones después en la estación Central de Nagasaki. El billete cuesta 120 yenes por persona adulta sin importar el número de estaciones recorridas.
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