¿Qué pensarías si digo que en tan solo 30 minutos de Tokio puedes viajar al pasado? Sí, lo has leído bien. Tomando un tren desde la capital, llegarás a Kawagoe, un pueblo con estilo tradicional situado al sur de la prefectura de Saitama. Es un lugar muy práctico de visitar si estas en Tokio. Yo fui un día para ver que escondía esta puerta al pasado japonés. ¡Acompáñame!
Kurazukuri no Machinami
Mi primera parada fue en la calle más famosa del pueblo. Kurazukuri no Machinami (Warhouse District) son un conjunto de casas antiguas con una peculiaridad: ¡son negras! Durante el periodo Edo, Kawagoe prosperó en el sector del comercio. Para evitar que sus almacenes y tiendas se quemasen, invirtieron grandes cantidades de dinero con este material negro, conocido por ser muy resistente.
Cuando llegamos era mediodía y había mucho ambiente por la calle. Hoy en día, hay tiendas en todos los bajos de las casa, des de productos tradicionales hasta una tienda de Ghibli.
Además, cerca de la calle principal encontramos también el símbolo de la ciudad: toki no kane – la torre de la campana.
Tiendas interesantes en Warehouse District
Aunque hay muchas tiendas con encanto, hubo una en particular que me enamoró. Fuka Yoshi Bijutsu Hyougu-ten (深善美術表具店), una tienda pequeña y antigua que está repleta de ilustraciones japonesas en muchos formatos; postales, cuadros, lienzos… Además, el dueño fue muy amable, tuvimos una pequeña conversación y nos dio folletos de la ciudad. Yo me compré unas postales de la zona ¡preciosas!
En una de las calles horizontales que nacen de la calle principal hay una tienda que no esperaba encontrar en un pueblo tradicional de Japón: Turkey Baazar. Sí, tal y como dice su nombre, es una tienda turca.
Una de las chicas que iba conmigo quería visitarla, así que, un poco sorprendida, la acompañé. Me quedé maravillada por la gran cantidad de lámparas tradicionales que hay, creando ambiente íntimo. El propietario, originario de Turquía, nos explicó un poco su historia y nos contó que tal era la vida en Japón, mientras nos invitaba a un té. Sabe inglés, así que cualquier duda que tenía le podía preguntar.
Gastronomía en Kawagoe
Muchas de las tiendas de esa zona también muestran la gastronomía local de Kawagoe. Si quieres probar algo característico, la anguila, el boniato y el sushi de estilo Edo son algunos de los platos más famosos. Aunque no era típico de allí, yo me enamoré de una tienda que vendían unos dangos muy grandes. ¡Deliciosos!
Si te gusta Starbucks, tienes una parada obligatoria en Kawagoe. Existe uno completamente sumergido al estilo tradicional. Por dentro hay un espacioso café con un pequeño jardín, totalmente recomendable para tomar un descanso en la excursión.
Comida en Furin (楓凜)
Después de los dangos, aun teníamos espacio para más comida. Fuimos a Furin, un restaurante de estilo meiji de más de 100 años especializado en sashimi y kaiseki (surtido de platos tradicionales).
Está escondido en la calle principal y nos costó encontrarlo; tuvimos que pasar dos veces para ver la pequeña puerta trasera que nos lleva al jardín y a la puerta principal del local.
Nosotros habíamos reservado previamente, así que pasamos directamente al interior. Un punto curioso fue que para entrar en el restaurante teníamos que sacarnos los zapatos.
Escogí un menú individual con sopa de miso, chawanmuchi (natillas de huevo) y chirashi con una gran variedad de pescado.
El santuario de Hikawa
En Kawagoe hay distintos templos y santuarios interesantes: Kita-in (uno de los templos más celebres de Saitama) , Naka-in (un lugar con cerezos y mucha vegetación donde nació el te de Kawagoe ) y el templo de Renkeiji (durante el periodo Edo fue una universidad budista nacional acreditada). Además de todos estos edificios también hay el santuario de Hikawa, el que visitamos.
Para empezar, en su entrada aparece un impresionante torii de 15 metros de altura. Ya a dentro, encontramos un panorama peculiar: la gente esta pescando peces rojos y rosas de cartón. Este santuario es conocido por ser el lugar del dios del matrimonio. Así pues, cuando quieras saber tu destino amoroso, tienes que pescar un pez rosa y dentro de él hay el omikuji con tu destino. Sin embargo, si te interesa saber sobre tu vida en general, tienes que pescar el rojo.
Otros puntos interesantes del santuario es el túnel con las tablas de madera, los ema, y… ¡un peculiar altar con zapatos colgado! Nunca supe para qué servía, y si vuelvo ¡será una de las primeras cosas que investigaré!
Kawagoe nocturna; una perla oculta
Vale la pena esperar a que anochezca. En Japón, a partir de las 18 de la tarde ya oscurece, así que no hace falta esperar hasta la noche para disfrutar de las vistas nocturnas. Totalmente recomendable, ya que si Kawagoe tiene encanto por la mañana, cuando muchos locales cierran – antes de las 18h, por cierto – quedan algunos restaurantes con luces y parece que la ciudad duerma. Aún así, ver todas las calles, ya sin tantos visitantes, ¡con este aspecto tradicional, ayuda mucho a tele-transportarse!
¿Cómo llegar a Kawagoe?
Yo estaba alojada en Saitama y me ofrecieron ir en coche. Aunque en verdad, el sistema de trenes esta bien y evitas todos los atascos.
Si te alojas en Shinjuku puedes tomar la línea JR Kawagoe, un tren local de 60 minutos y 760 yenes hasta Honkawagoe. También puedes tomar el tren Redarrow en Seibu-Shinjuku. Te llevará directamente a la estación Honkawagoe en 40 y por 890 yenes.
Desde Ikebukuro puedes tomar la línea Tobu Tojo y por 470 yenes y 30 minutos de viaje puedes llegar a Honkawagoe.