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Varias veces me han preguntado: «¿Cual es el lugar que me recomendarías visitar en Japón?». Y, aunque Japón es un destino con innumerables y diversas atracciones, mi respuesta termina siendo siempre la misma: Shirakawago.

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Shirakawago: pintoresco en todas las estaciones del año

Una de las razones principales es porque la región donde se refugia la aldea histórica de Shirakawago se puede disfrutar en todas las estaciones del año, con sus características en cada una de ellas. En primavera: agradable por el clima y los cerezos en flor. En verano: embellecida por el verde de la pradera, y los girasoles en su mejor versión. En otoño: decorada con las coloridas hojas de arce. Y en invierno: cubierta de nieve y con el resplandor de la iluminación al anochecer.

Vista de la aldea de Shirakawago desde las montalas

La aldea es simplemente mágica, y que esto sea así se debe principalmente a que mantiene el aspecto y la atmósfera como hace cientos de años. Por eso no es sorpresa que haya sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1995.

Rueda de madera en Shirakawago (Japón)

 

Casas históricas de Shirakawago

Muchas de las casas en esta aldea ahora funcionan como museos, y otras tantas como alojamiento. Nosotros tuvimos la oportunidad de acceder a la casa Nagase (長瀬家) y, para disfrutar de su interior, hay que pagar 300 yenes que valen la pena. Es recomendable como mínimo entrar a una de las casas y observar los numerosos objetos que en estas se exhiben. En la Nagase, por ejemplo, hay un altar budista de unos quinientos años, obras de arte, y utensilios en el primer piso (a decir verdad, este «primer piso» sería la planta baja para nosotros, ya que en Japón no existe el piso «0»). En el segundo y tercer piso, como un recuerdo de la aldea histórica se exponen herramientas utilizadas en la vida cotidiana de esa época. Al cuarto y último piso -que sería el altillo- no se puede acceder, pero sí es posible asomarse para ver de qué manera están colocados los macizos troncos de árboles y las sogas que los sujetan para darle ese diseño tan particular denominado gassho zukuri (literalmente «construcción con las palmas de las manos juntas», haciendo referencia a su forma con el techo inclinado unos 45 a 60 grados). Según información de la página oficial, durante los meses de pleno invierno (diciembre a marzo) se puede degustar un rico té de soba (trigo sarraceno utilizado para hacer los fideos finos japoneses) hecho en la misma casa Nagase, junto a la antigua chimenea.
Casas de madera tradicionales en Shirakawago

Como mencionamos anteriormente, hay muchas casas (más de veinte en realidad) donde es posible pasar la noche y, si se tiene margen de tiempo, esto es lo ideal. Dar un paseo a lo largo de los arroyos durante una fresca mañana de verano, o fotografiar las casas iluminadas por dentro y vestidas de blanco por fuera en una noche de invierno deben ser dos experiencias tan disímiles como inolvidables, ambas en el mismo lugar. La próxima vez que visite Shirakawago, voy a asegurarme de experimentarlo yo mismo.

Puente colgante de madera en Shirakawago
Casas de madera tradicionales en Shirakawago, Japón

 

Cómo llegar a Shirakawago

Se puede tomar el autobús Nohi (con previa reserva) desde la estación JR Takayama. Tarda unos 50 minutos hasta la parada de Shirakawago, y luego cinco minutos a pie.
La conexión más rápida entre Tokio y Shirakawago es a través del Hokuriku Shinkansen desde Tokio hasta Toyama (unos 170 minutos, y cuesta unos 12 500 yenes ida). De ahí hay que cambiarse al bus que va hasta Shirakawago (90 minutos, 1700 yenes ida)

En coche son aproximadamente dos horas y media desde Nagoya.

 

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Dario Imaz

Dario Imaz

Hace unos siete años arribé a tierras niponas con la ilusión de aprender más sobre su fascinante cultura, y ésta me cautivó de tal manera que decidí dejarlo todo e instalarme aquí definitivamente. En esta serie de encuentros no sólo voy a mostrarte algunos lugares recónditos y otros populares, sino también contarte historias y anécdotas relatadas desde el corazón de este maravilloso país. ¡Bienvenidos a Japón!

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