Según la mitología japonesa, Japón se creó de la mano de los dioses Izanagi e Izanami. Sus hijos fueron las montañas, los ríos, los volcanes, y toda la naturaleza existente. No me extraña que los antiguos japoneses adjudicaran la creación de Japón a unos dioses, ya que su geografía es extremadamente compleja, peligrosa y sorprendente.
Un 80% de Japón es territorio montañoso con más de 100 volcanes, algunos de los cuales siguen activos. Para entender esta naturaleza desenfrenada, vamos a explorar la topografía japonesa, a descubrir cómo se formaron los volcanes en Japón y, como no puede faltar en Voyapon, a conocer los lugares más interesantes y bellos para visitar alrededor de algunos volcanes.
¿Por qué hay tantos volcanes en Japón?
La localización de Japón parece haber estado planeada a propósito, ya que está en una de las zonas más complicadas del planeta geológicamente hablando. Pero su complejidad se le atribuye al Cinturón de Fuego del Pacífico, la zona inferior de la corteza terrestre donde se ubica el archipiélago nipón.
Esta es una zona llena de actividad sísmica intensa y alberga el 75% de los volcanes activos de todo el mundo. Rodea, tal cómo indica su nombre, al Océano Pacífico: viaja desde Nueva Zelanda, sigue hacia Filipinas y Japón, cruza hasta la costa Oeste de Estados Unidos, cubre parte de centro américa y baja hasta la costa latino americana de Chile.
El Cinturón de Fuego del Pacífico se formó a lo largo de los siglos a causa de la gran actividad de las placas tectónicas, que son fragmentos de la capa inferior de la corteza terrestre. Existen varias placas principales y otras menores que están en constante movimiento ya que el interior de nuestro planeta es muy activo. Al chocar, estas crean zonas de subducción (cuando una placa se sobrepone con otra) provocando cambios en la superficie: terremotos, creación de volcanes e incluso la creación de fosas oceánicas.
Zonas con volcanes japoneses © Damon Lam Beppu es una zona conocida de Japón repleta de aguas calientes
Justamente, Japón se encuentra encima de muchas de estas placas: la placa continental de Ojotsk, la placa continental de Amuria, la gran placa continental Euroasiática, la placa oceánica Filipina y la placa Pacífica.
Los volcanes japoneses y los terremotos
Japón es famoso por la gran cantidad de terremotos anuales, ya que en todas las zonas con desplazamientos de placas hay alto riesgo de terremotos. Para que te hagas una idea, la media de terremotos entre 2001 y 2010 fueron 4800 temblores por año, a pesar de que la mayoría son leves. Aún así, dependiendo de la posición de las placas y del movimiento que realizan, pueden provocar grandes catástrofes.
Por ejemplo, el año 1923 es recordado por el Gran terremoto de Kanto de 7,8 grados en la escala de Richter afectando el área de Tokio, con más de 100.000 muertos. En 1995 hubo el Gran terremoto de Hanshin-Awaji en Kobe de 6,9 grados y en 2007 el terremoto de la costa de Chuetsu en la prefectura de Niigata de 6,8 grados.
Pero el más grave en los últimos años fue el Terremoto y tsunami de 2011, causado por el movimiento de la placa del Pacífico hacia la placa de Euroasia.
Según cuentan los expertos, en un punto ubicado a 100 km de la costa japonesa se acumulaba tensión de las placas desde hacia más de 200 años. El 11 de marzo de 2011 se liberó toda esa energía, generando un enorme terremoto de 9,0 grados y el tsunami. Si te interesa entender que sucedió, dejo un video dónde lo explican detalladamente.
Los mejores volcanes en Japón
Los volcanes japoneses son lugares misteriosos y, a veces, peligrosos. Por suerte, a lo largo de los años su actividad ha ido en descenso, y en Japón puedes visitar muchos de ellos, tanto los inactivos como los activos.
1. ¿Es el Monte Fuji un volcán?
Indiscutiblemente, el volcán más famoso es el Monte Fuji. Y sí, es un volcán, el más grande de Japón. Es el punto más alto del país con 3.776 metros de altura y se encuentra dormido desde el 1707. Ubicado entre la prefectura de Shizuoka y Yamanashi, tiene un gran simbolismo para la religión sintoísta y es muy importante para los japoneses.
Cuando lo vi por primera vez, entendí el porqué de la admiración hacia el Fuji. Lo mismo ocurrió cuando lo vi por segunda, tercera, cuarta vez… El majestuoso Monte Fuji se hace rogar, y muchas veces está oculto tras la niebla. Si uno de tus objetivos a la hora de viajar a Japón es ver el Monte Fuji, te recomiendo armarte de paciencia, ya que puede ser una tarea difícil.
En invierno es cuando más se deja ver, y un buen lugar para disfrutar de él es desde la isla de Enoshima. Si tu intención es escalarlo, es mejor visitar Japón durante los meses de verano, ya que solo se puede realizar esta actividad desde julio hasta principios de septiembre. Igualmente, en todas las estaciones del año puedes tener oportunidad de ver el Monte Fuji y sus alrededores donde se puede realizar muchas actividades, como visitar el lago Kawaguchi-ko o ver los sakuras con el monte de fondo.
El Monte Fuji desde Enoshima
© Lucía TsujiguchiEl volcán Fuji nevado © Kirill Petropavlov
2. El Monte Daisen, el Fuji del oeste
Si Monte Fuji es el punto de referencia en la zona oriental de Japón, el Monte Daisen lo es en la zona occidental. Con una forma parecida al Fuji, mide 1729 metros y se ubica en la prefectura de Tottori. El Monte Daisen se puede disfrutar durante todas las estaciones del año: puedes ver los sakura y los momiji en primavera y otoño, disfrutar del paisaje verde y las caminatas en verano y esquiar en invierno.
3. Sakurajima, uno de los volcanes más activos en Japón
Si quieres vivir emociones más fuertes, puedes visitar el volcán Sakurajima, en el sur de Kyushu. Es el símbolo de la prefectura de Kagoshima y es uno de los volcanes más activos del archipiélago. Puede tener numerosas erupciones, pero esto no es inconveniente para los habitantes de Sakurajima o Kagoshima, que viven justo en frente del volcán.
4. El Monte Azuma-Kofuji, el bebé Fuji
Tal y como indica su nombre, el Azuma-Kofuji es el hijo del Monte Fuji. Con sus 1700 metros de altura, este volcán está ubicado en la prefectura de Fukushima y se puede escalar. Recomendable para aquellos aventureros que quieran conocer su cráter único y hacer una excursión entre la naturaleza.
Bonus track: más volcanes en Japón
Además de los volcanes mencionados, en Japón existen muchos más. Nostros hemos viajado hasta Asahikawa, en Hokkaido, para conocer el volcán Asahidake y hacer snowshoeing. Y también hemos visitado el Monte Aso en Kyushu, para ver las profundidades de la ruralidad del sur de Japón.
Después de este artículo, te darás cuenta de las razones las cuales hacen que Japón sea un país especial. Espero que hayas podido aprender nueva información y nos gustaría conocer tu experiencia visitando alguno de los volcanes japoneses en los comentarios.